Honda iniciará pruebas de su sistema de electrólisis de agua a alta presión en la Estación Espacial Internacional (ISS), como parte de un ambicioso proyecto que busca crear un sistema energético autosuficiente y circular.
Esta tecnología, diseñada para condiciones extremas, está pensada para sostener la vida humana en misiones espaciales de larga duración, pero también para generar soluciones sostenibles aplicables en la Tierra.
El sistema funciona dividiendo agua en hidrógeno y oxígeno mediante energía solar durante el “día lunar”. Durante la noche, ambos elementos se recombinan en pilas de combustible para generar electricidad, con agua reutilizable como único subproducto.
Se trata de un ciclo cerrado que podría aplicarse en bases lunares, viviendas autosuficientes, vehículos de nueva generación o instalaciones en zonas remotas.
“El sistema permitiría no solo suministrar energía limpia y oxígeno a bases lunares, sino también inspirar soluciones sostenibles para viviendas autosuficientes, vehículos de nueva generación o instalaciones en zonas remotas”, señalaron desde la compañía.
La clave: un electrolizador compacto y sin compresión mecánica
El componente principal que será probado en la ISS es un electrolizador de agua a alta presión desarrollado por Honda. Esta pieza fue diseñada especialmente para el entorno espacial, donde cada gramo y centímetro son críticos. Es compacta, liviana y energéticamente eficiente. A diferencia de otros sistemas similares, no requiere compresión mecánica, lo que reduce el mantenimiento y mejora su durabilidad.
Para llevar a cabo las pruebas en microgravedad, Honda se ha aliado con dos socios estratégicos. Sierra Space transportará el sistema con su vehículo espacial reutilizable, mientras que Tec-Masters será responsable de la instalación y operación del equipo en la estación. Esta colaboración permitirá evaluar el rendimiento real de la tecnología en condiciones espaciales y proyectar su uso en futuras misiones.
Tecnología espacial con impacto en la sostenibilidad terrestre
Este proyecto se enmarca en la estrategia de expansión espacial de Honda, reforzada en 2024 con la creación de su división Space Development en Estados Unidos. Desde allí, y con el apoyo de sus equipos técnicos en Japón, la compañía busca aplicar su experiencia en movilidad y energías limpias a nuevos escenarios fuera de la Tierra. Es una extensión natural de su visión de innovación para mejorar la vida humana.
Más allá del experimento técnico, Honda destaca el potencial de esta tecnología para enfrentar desafíos ambientales en la Tierra. Soluciones creadas para misiones lunares podrían convertirse en herramientas clave para avanzar hacia sociedades más sostenibles, con acceso a energías limpias y modelos de consumo responsables.
“Tecnologías como esta, nacidas para responder a los desafíos de la exploración lunar, podrían ser clave para avanzar hacia sociedades más sostenibles, con acceso a energías limpias y modelos de consumo responsables”, afirmaron desde la empresa.