Desde bonos verdes hasta microcréditos con impacto ambiental, la conferencia más grande del mundo sobre financiación de la biodiversidad se realizó en Chile, dejando en claro una convicción: proteger la naturaleza es clave para el desarrollo, y el momento de actuar es ahora.
Chile se convierte en epicentro global por la naturaleza
Con la participación de 133 países y la presentación de 91 planes nacionales, Chile fue sede de la sexta Conferencia Global sobre Financiación de la Biodiversidad, organizada por BIOFIN del PNUD. La cita reunió a gobiernos, actores del sector privado, pueblos indígenas, ONGs y expertos para encontrar nuevas formas de valorar, proteger y financiar la naturaleza en una era marcada por la crisis climática y la pérdida acelerada de especies.
“La biodiversidad debe tener un lugar claro, medible e integrado dentro de las cuentas nacionales y el desarrollo sostenible”, afirmó Maisa Rojas, ministra del Medio Ambiente de Chile, durante la apertura del evento. Chile, dijo, ya trabaja en la integración entre políticas climáticas y de biodiversidad, destacando herramientas como la Ley Marco de Cambio Climático y las soluciones basadas en la naturaleza.
Innovación financiera para salvar el planeta
Desde bonos de naturaleza hasta el rediseño de subsidios que dañan el medioambiente, los países participantes avanzaron en soluciones que permitan movilizar recursos de forma más eficiente, justa y sostenible. En conjunto con el Fondo para el Medio Ambiente Mundial (GEF), el PNUD está apoyando la elaboración de planes financieros que buscan cerrar una brecha de más de 700 mil millones de dólares anuales para proteger la biodiversidad.
“Proteger la naturaleza no es una opción: es la base que sostiene nuestras economías y nuestro bienestar”, recalcó Michelle Muschett, directora regional del PNUD para América Latina y el Caribe.
Resultados que ya se sienten en todo el mundo
La Iniciativa BIOFIN ya ha catalizado más de 1.600 millones de dólares para la biodiversidad en 41 países desde 2018. Con pequeñas inversiones estratégicas se han logrado grandes transformaciones:
- Argentina destinó 420 millones de dólares para proteger el Yaguareté en Misiones.
- Ecuador canalizó más de 800 millones en microcréditos verdes.
- Botsuana aumentó en 7 millones los ingresos de parques nacionales al ajustar sus tarifas.
- Tailandia implementó una tasa turística para proteger arrecifes de coral.
- Kazajistán triplicó el presupuesto para sus áreas protegidas.
El modelo de “financiar el financiamiento” —movilizar grandes recursos a partir de inversiones pequeñas y catalizadoras— se posiciona como una de las herramientas más efectivas para acelerar el cumplimiento de las metas del Marco Global de Biodiversidad de Kunming-Montreal.
Una promesa compartida para proteger la vida en la Tierra
“Estamos transformando el compromiso en acción”, señaló Midori Paxton, directora del Nature Hub del PNUD. Con hitos clave en el horizonte como la COP30 en Brasil y la Conferencia Internacional de Financiación para el Desarrollo en España, la oportunidad para integrar biodiversidad en los planes de desarrollo nunca ha sido más urgente.
En palabras del director ejecutivo del GEF, Carlos Manuel Rodríguez: “La biodiversidad no puede seguir siendo tratada como un tema secundario. Es momento de reorientar los flujos financieros y poner la naturaleza en el centro del desarrollo”.
Una invitación global desde Chile
Esta histórica conferencia no solo visibilizó el rol de Chile como articulador de soluciones ambientales, sino también envió un mensaje claro al mundo: la financiación de la biodiversidad es posible, necesaria y urgente.