En un paso histórico para la conservación de la fauna silvestre chilena, Fundación Rewilding Chile inauguró el primer Centro de Rescate y Rehabilitación del Huemul, una infraestructura única en su tipo dedicada exclusivamente a la recuperación del ciervo más austral del mundo, declarado en peligro de extinción.
Concebido como un verdadero hospital para huemules y construido con los más altos estándares internacionales, el centro está ubicado en el sector de Las Horquetas, junto al Parque Nacional Cerro Castillo, hogar de cerca del 10% de los huemules que sobreviven entre Chile y Argentina —una especie de la que apenas quedan unos 1.500 individuos, equivalentes al 1% de su población original.
Un hito dentro del “Corredor del Huemul”

El nuevo recinto forma parte del Corredor del Huemul, una estrategia de conservación a gran escala impulsada por Fundación Rewilding Chile, el Ministerio de Agricultura, CONAF y el SAG, que busca reconectar poblaciones fragmentadas y fortalecer su recuperación a lo largo de la cordillera de los Andes.
El predio donde se emplaza el centro fue anteriormente utilizado para ganadería extensiva, y fue adquirido por Rewilding Chile en 2019 con el fin de restaurar el hábitat natural del huemul y favorecer la conectividad ecológica.
“Estamos orgullosos de inaugurar esta infraestructura, la primera dedicada íntegramente a la salud del huemul. Fortalece el trabajo colaborativo que realizamos junto al SAG y CONAF para la protección de la especie y la consolidación del Corredor del Huemul”,
destacó Cristián Saucedo, director de Vida Silvestre de Rewilding Chile.
Un “hospital del bosque” para salvar a una especie emblemática
El Centro de Rescate y Rehabilitación del Huemul cuenta con 4,9 hectáreas de superficie destinadas a la atención médica y manejo veterinario especializado. Posee módulos de trabajo para el equipo de guardafaunas, zonas de recuperación y recintos separados según el tipo de afección o patología.
Todo el perímetro —de casi un kilómetro— está protegido por un cerco electrificado de dos niveles, diseñado para impedir el ingreso de depredadores y garantizar un entorno seguro para los ejemplares en tratamiento.
El funcionamiento estará a cargo de un equipo técnico y veterinario especializado de la fundación, con el apoyo de expertos científicos y colaboradores nacionales e internacionales, consolidando un modelo de gestión integral para el rescate, rehabilitación y reinserción de huemules en su hábitat natural.
Amenazas y urgencia de acción
Los huemules que habitan en Cerro Castillo enfrentan cuatro amenazas críticas:
- Ataques de perros asilvestrados,
- Transmisión de enfermedades desde el ganado,
- Atropellos vehiculares en la Carretera Austral, y
- Competencia con especies exóticas invasoras, como el ciervo rojo y el jabalí.
Según datos del SAG, más del 50% de las atenciones realizadas a huemules entre 2011 y 2022 corresponden a casos asociados a estas amenazas, principalmente mordeduras de perros y lesiones infecciosas como la Linfoadenitis Caseosa (LAC), enfermedad que puede ser tratada ahora en el nuevo centro.
Conservación con visión de futuro
El Parque Nacional Cerro Castillo alberga un núcleo poblacional clave con al menos 118 huemules de distintas edades. En este contexto, el centro no solo ofrecerá atención médica, sino que también funcionará como espacio de investigación, monitoreo sanitario y educación ambiental, permitiendo generar conocimiento científico para la protección de la especie a nivel nacional.
“Este proyecto representa un cambio de paradigma: pasamos de la reacción al rescate preventivo y al manejo sanitario con base científica. Es un ejemplo de colaboración público-privada para conservar una de las especies más emblemáticas de Chile”,
subrayó Saucedo.
Una nueva esperanza para el huemul
Con la apertura del primer Centro de Rescate y Rehabilitación del Huemul, Chile da un paso decisivo hacia la recuperación de este símbolo nacional. La iniciativa reafirma la importancia del trabajo conjunto entre instituciones públicas, fundaciones y comunidades locales para asegurar que las futuras generaciones puedan seguir viendo al huemul en libertad, recorriendo los bosques y montañas del sur de Chile.







