Presentes de forma abundante en los todos los bosques nativos de Juan Fernández, el maqui (Aristotelia chilensis) y la murtilla (Ugnia molinae) constituyen recursos poco valorados y subexplotados por la comunidad del archipiélago, siendo incluso consideradas especies exóticas invasoras o derechamente “plagas” no deseadas.
Una situación que pronto comenzará a cambiar, gracias a un proyecto que pretende convertir este problema en una oportunidad de desarrollo para las mujeres de la isla Robinson Crusoe, a través de la elaboración y comercialización de pulpa concentrada congelada. Un ingrediente saludable de origen único, que mantendrá intactas las propiedades nutricionales y funcionales de estos “súper berries”.
La ejecución del proyecto liderado por la Corporación Robinson Crusoe y la Fundación para la Innovación Agraria (FIA), tendrá una duración de dos años y medio y considera la participación activa de la comunidad fernandeziana, además de Fundación Chile, la empresa Nativforlife, la oficina local de CONAF y la Municipalidad de Juan Fernández.
Una iniciativa que además tiene la virtud de fomentar la ocupación del recurso humano femenino, “que actualmente se encuentra limitada a la recolección de frutos silvestres para autoconsumo, dado que la principal actividad económica del lugar –la pesca– es esencialmente masculina”, comenta la representante de la Corporación Robinson Crusoe y coordinadora del proyecto, Scheila Recabarren.
Asimismo, se espera contribuir al control de las poblaciones críticas de estas especies exóticas introducidas, disminuyendo su dispersión como efecto de la recolección intensiva de sus frutos. “Estas plantas son plagas dentro del archipiélago, y han afectado el suelo y las especies endémicas de Juan Fernández. Entonces, la idea es convertir el problema en una oportunidad comercial de desarrollo, que aporte al control de estas plagas y disminuya la dispersión de semillas”, explica Recabarren.
Oportunidad de mercado
Actualmente el maqui y la murtilla son recolectados y utilizados en pequeña escala en la isla Robinson Crusoe, especialmente por mujeres, para la elaboración artesanal de mermeladas, dulces y licores, productos que son consumidos al interior de la propia comunidad. “Sin embargo ahora el desafío es generar un producto de alta calidad, que responda a los estándares del mercado de alimentos saludables”, señala el ejecutivo de Innovación de FIA y supervisor del proyecto, Emilio Rojas.
“El maqui y la murtilla son berries nativos con un alto poder antioxidante y reconocidas propiedades saludables, y forman parte del atractivo mercado de los alimentos asociados a salud y bienestar, que mueve anualmente más de US$700 billones a nivel mundial y US$3 billones anuales en Chile. Sin duda, las posibilidades son enormes”, subraya el profesional.
Por eso, el director ejecutivo de FIA, Héctor Echeverría, celebra que Robinson Crusoe se haga parte de los desafíos y oportunidades que tiene Chile en materia de innovación alimentaria. “En FIA estamos comprometidos en contribuir a desarrollar una industria de alimentos saludables, ingredientes funcionales y aditivos especializados para Chile, promoviendo y apoyando modelos de negocio que agreguen valor a las excepcionales materias primas que brotan de nuestra tierra, donde Juan Fernández no es la excepción”.
Opinión que comparte Isabel Lecaros, gerenta de Nativforlife, empresa asociada al proyecto, dedicada a la recolección, procesamiento y comercialización de los denominados “súper berries”. “Nosotros estamos orientados al mercado del bienestar y la salud (wellnes), principalmente de exportación. Y en tal sentido, creemos que la comunidad de Juan Fernández posee una excelente oportunidad de desarrollo a través de la generación de productos con alta concentración de compuestos bioactivos”.
Las pulpas serán producidas en origen, quedando instaladas todas las capacidades para que las mujeres de la isla gestionen desde la recolección de las bayas hasta el procesamiento y el envasado del producto. “La idea es formular productos innovadores para consumo directo a partir de estas pulpas”, señala Lecaros.
“Proyectamos un negocio muy interesante para las mujeres de la isla, porque al asentar los conocimientos para tratar estos berries –mejorando las prácticas de recolección y transformándolos en pulpa congelada– se mantienen las propiedades nutricionales, logrando un producto versátil para ser utilizado en la industria alimentaria”, agrega la ejecutiva de Nativforlife.
El proyecto contempla la capacitación de las mujeres de la isla en las tareas de recolección, manejo de postcosecha y procesamiento de berries silvestres, así como también en la comercialización de los nuevos productos elaborados. Pero la idea además es generar un bien público, de modo que “se considera la difusión del protocolo generado y los productos desarrollados en la comunidad fernandeziana y en los segmentos del mercado nacional relacionados con alimentos saludables”, concluye el director de FIA, Héctor Echeverría.
Recurso abundante
El maqui y la murtilla son frutos nativos de Chile que son consideradas especies exóticas para el archipiélago debido a que fueron introducidos a Juan Fernández hace más de cien años, desplazando la flora endémica y creciendo de manera acelerada. Estudios indican que la murtilla, la mora y el maqui en conjunto ocupan alrededor de 920 hectáreas de la superficie de la isla Robinson Crusoe, por lo que fueron catalogados como plaga.
Mujeres de Robinson Crusoe buscan innovar en alimentos saludables