Desde Construye2025 se busca destacar el importante rol que los recicladores tienen en la eficiente gestión de los residuos de la construcción y demolición (RCD), logrando que la industria sea más eficiente y tenga un menos impacto en el medio ambiente.
Cada 1 de marzo se celebra el Día Mundial del Reciclador. Y si bien se trata de un oficio que existe hace apenas unas décadas, hoy tiene una enorme importancia. Especialmente en el caso de industrias que generan gran cantidad de desechos, como la construcción.
Alejandra Tapia es coordinadora técnica de Construye2025, el programa respaldado por Corfo que busca que la industria de la construcción sea más eficiente y amigable con el medio ambiente y tiene entre sus principales tareas la gestión de residuos de la construcción y demolición (RCD). Ella explica que la labor de los recicladores es recolectar residuos que se producen en la obra para que, posteriormente, sirvan de materia prima secundaria para la fabricación de nuevos productos. Esto implica que tienen un rol particularmente importante, debido a que alrededor del 80% de los desechos de una obra se pueden reciclar.
Y, según agrega Tapia, la existencia o no de quienes hacen este trabajo puede ser la piedra de tope al momento de desarrollar un plan de reciclaje: “Una de las mayores dificultades que tiene la gestión de los RCD en obra, es la falta de recicladores que retiren los residuos en el lugar y tiempo requerido”.
Esto convierte al oficio de los recicladores en un punto crucial, porque para que el reciclaje funcione, es fundamental que las constructoras separen los residuos in situ, implementando puntos limpios, esto facilita el reciclaje de los materiales, además de evitar que se contaminen o ensucien, y sean inservibles. “Al separar los residuos por tipo, la constructora pude obtener ahorros en el presupuesto de disposición final reduciendo el esponjamiento en el transporte producto de las mezclas de materiales distintos y enviando menos residuos a los vertederos. Además, facilita la recolección que realizan los recicladores. Es importante que se establezcan acuerdos con constructoras para la programación de las recogidas, ya que generalmente, no se cuenta con mucho espacio en las obras, y en tal caso es primordial que la recogida sea oportuna”, dice Tapia.
Finalmente, esta labor no sólo tiene valor en relación con el cuidado del medio ambiente, sino que un importante incentivo económico. “El reciclaje o reciclamiento es una actividad económica que cada vez tiene mayor potencial de desarrollo, así lo muestran las cifras del Servicio de Impuestos Internos, al año 2005 no con declaración de ventas, sin embargo, al 2015 la actividad obtuvo ventas anuales de UF 2 MM, incluso más que la actividad de demolición. Hoy en día está la necesidad de resguardar los recursos renovables y no renovables, debido al impacto negativo que produce su explotación en el medio ambiente, y una respuesta sustentable a ello es la economía circular, en este sentido, los recicladores son un actor fundamental para el desarrollo de esta nueva economía”, dice la especialista.