La Comisión de Medio Ambiente del Senado despachó el proyecto de ley que prohíbe el ingreso y tránsito de vehículos motorizados en arenas de playa, terrenos de playa, humedales costeros y dunas costeras en todo el territorio nacional. La iniciativa continuará ahora su tramitación en la sala del Senado, donde será sometida a votación.
Proteger la biodiversidad costera
El proyecto busca resguardar ecosistemas altamente vulnerables como playas, dunas y humedales costeros, los que albergan especies amenazadas como el pilpilén común y el chorlo nevado. El tránsito de vehículos en estas zonas provoca la destrucción de nidos, atropello de polluelos y especies de menor tamaño, además de generar perturbación y estrés a la fauna.
“La entrada de vehículos provoca un impacto negativo en estas especies y áreas de nidificación y alimentación. Es relevante tomar conciencia sobre la importancia de nuestras playas, dunas y humedales costeros para las múltiples especies, como aves y flora”, afirmó la ministra de Medio Ambiente, Maisa Rojas, destacando la urgencia de fortalecer la regulación ambiental.
Un problema crítico en la costa chilena
Especialistas también valoraron el avance del proyecto. Diego Luna Quevedo, especialista en Política y Gobernanza de Manomet Conservation Sciences, señaló: “El tránsito indiscriminado de vehículos en playas y dunas causa destrucción y fragmentación de hábitat, erosión severa, compactación del suelo, pérdida de servicios ecosistémicos y daños en vegetación. Todo esto afecta directamente el éxito reproductivo de aves playeras como el pilpilén común y el chorlo nevado”.
Multas y sanciones para infractores
El proyecto de ley establece multas para quienes incumplan la normativa y, en caso de reincidencia, contempla la suspensión de la licencia de conducir hasta por seis meses e incluso la inhabilidad temporal para obtenerla.
Hacia una costa más protegida
De aprobarse en sala, la iniciativa marcará un hito en la protección de los ecosistemas costeros de Chile, reforzando el derecho de las comunidades a disfrutar de playas y dunas libres de la presión de los vehículos motorizados, y promoviendo un uso responsable de estos espacios que son patrimonio natural del país.
