El compromiso del CEO con la sustentabilidad. Por: Javiera Salazar, Jefe de proyectos Sustentables Mall Plaza
En los años recientes hemos visto el aumento del compromiso económico, social y ambiental de las empresas en este llamado “movimiento sustentable” que ha crecido ampliamente en el mundo incluyendo a nuestro país.
Diversos estudios y encuestas a CEO han sido realizados en los últimos años alrededor del mundo, sin embargo el de mayor connotación corresponde al Estudio a 1.000 CEO de Sustentabilidad del Global Compact-Accenture, siendo representantes de compañías del PRI (Principles for Responsible Investment), apoyados por las Naciones Unidas quienes en base a su participación de más de 1.200 empresas ha construido una red internacional de inversionistas trabajando para entender las implicaciones de sostenibilidad, e incorporar estos temas en sus decisiones de inversión.
Tanto inversionistas como líderes económicos han sido capaces de comprender sobre las ventajas competitivas de incorporar la sustentabilidad en sus compañías, y como actúa como un gran diferenciador para la obtención de nuevas oportunidades. Siendo un estudio que se realiza cada tres años, cuando se realizó la primera encuesta el año 2007, los CEO estaban comenzando a alinearse a esta nueva estrategia. El 2010, ya se estaba realizando un manejo activo por incorporar los temas ambientales, sociales y económicos como un solo modelo, donde el 93% de los CEOs indicaban que la sustentabilidad era “importante” o “muy importante” para el futuro éxito de sus negocios.
Sin embargo algo pasó el año 2013: a pesar de estar firmemente incorporada la sustentabilidad en su agenda, han manifestado que la ambición que sentían inicialmente se ha tornado en frustración, debido a las expectativas del mercado diferentes a las manifestadas, lo cual ha significado en no poder cuantificar el verdadero valor de la sustentabilidad. Además, la sensación es de no haber logrado las metas esperadas en años anteriores.
Otro tema que se ha profundizado es el “grito” generado por las compañías para una intervención pública con el fin de alinear políticas públicas con sustentabilidad, y pasar de una sensación esporádica de core business a un impacto colectivo y realmente transformador.
¿Cómo enfrentan este “estancamiento y frustración”? Diversas acciones han sido analizadas por los CEO con el fin de modificar las estrategias empleadas hace unos años, como también su modelo de negocio, y así lograr una sostenibilidad de liderazgo y alto rendimiento:
Realismo: aquellas empresas más exitosas fueron las que lograron ser más ambiciosas de manera realista (y las que declararon que no se estaba haciendo lo suficiente).
Crecimiento y diferenciación: la urgencia de los desafíos globales ofrece una oportunidad para diferenciar sus productos y servicios, acceder a nuevos mercados y crecer en nuevas regiones y países donde sus productos pueden satisfacer una necesidad apremiante.
Medición: siendo uno de los temas más relevantes, el seguimiento ambiental es clave para identificar la performance de lo implementado, lo cual permitirá además tomar decisiones a futuro en caso de haber sido una medida exitosa o no. Pero no basta solo con medir y realizar una gestión de lo medido, sino además cuantificar el valor de la iniciativa sustentable, y así realizar un impacto en las comunidades. Lo que no se mide, no existe.
Tecnología e innovación: invertir en energías renovables es prácticamente un hecho, por lo que seguir estudiando nuevas tecnologías es un deber de las compañías. Además, incorporar un closed-loop como modelo de negocios llevará a una real ventaja a las compañías. (aplicado a reciclaje, closed-loop significa que un material puede ser indefinidamente reciclado sin degradarse sus materiales, permitiendo repetir el proceso continuamente, a diferencia de un open-loop, que termina en un vertedero).
Comunicación: ya no basta con simplemente Hacer y Comunicar. Se deben crear lazos con consumidores, comunidades locales, empleados, entre otros. En conjunto se establecerá que es lo que se quiere y se debe hacer.
En Chile no estamos lejanos a lo manifestado por los CEO alrededor del mundo. La gran interrogante que existe es si de verdad las estrategias y medidas de sustentabilidad se manifiestan en beneficios económicos, sociales y medioambientales. La falta de una clara relación con el valor del negocio es un factor crítico para disuadirlos para tomar una acción más rápida en la sostenibilidad, y concretarla.
Es necesario que las fuerzas y creencia en la sustentabilidad se les dé el tiempo suficiente y preciso para que maduren y procesen la inversión en sustentabilidad. Las oportunidades que se obtienen generan un alto valor que todavía no son percibidos debido a la alta velocidad y retorno que se espera. Esperemos que el próximo estudio a realizar el año 2016 implique una nueva visión más realista y esperanzadora que la pasada.
Javiera Salazar Zúñiga. Arquitecto, LEED AP, MEU.
Consultor, coordinador y gestor en sustentabilidad para edificios nuevos, existentes, oficinas y retail. Amplia participación en investigación y puesta en marcha de modelos y políticas de innovación en diseño eficiente, evaluación y desarrollo de soluciones para proyectos existentes y futuros, como también en modelos de gestión de sustentabilidad. Ha asesorado, coordinado y gestionado más de 40 proyectos con un total de 500.000 m2 aproximados. Estuvo a cargo de Unidad Asesoría LEED en Idiem de Universidad de Chile, y actualmente es Jefe de proyectos Sustentables en Mall Plaza y miembro del directorio del Chile GBC.
Ha participado en procesos de desarrollo de contenido de reporte de sostenibilidad e informes de sustentabilidad en compañías, como también en programas sostenibles.
