La iniciativa de Sodimac, junto a Ceresita y aliados comunitarios, recorrerá nuevamente el país desde Antofagasta a Puerto Montt para revitalizar espacios emblemáticos con alto valor social y cultural.
Con brochas, rodillos y una paleta de colores que refleja la diversidad de Chile, “Chile Pinta” inicia su recorrido 2025 para revitalizar espacios públicos y privados que forman parte del corazón de sus comunidades. Este año, la iniciativa impulsada por Sodimac y que cuenta con la participación especial de Ceresita como aliado experto, beneficiará directa e indirectamente a más de 2,2 millones de personas.
Desde su creación en 2008, el programa ha intervenido espacios emblemáticos de alto valor social y cultural en distintas regiones del país, apostando por un modelo colaborativo donde participan vecinos, voluntariado corporativo, socios del Círculo de Especialistas y trabajadores de Sodimac.
“Chile Pinta tiene como objetivo recuperar espacios que son parte de la identidad de las comunidades, generando un impacto positivo y duradero. Se construye en terreno, con la fuerza de la colaboración y el compromiso de todos quienes se suman”, destacó Juan Carlos Corvalán, Gerente de Sostenibilidad y Cumplimiento de Sodimac.
De norte a sur, con impacto local
En esta edición, Chile Pinta 2025 intervendrá espacios en Antofagasta, La Calera, tres comunas de Santiago, Concepción, Temuco, Puerto Varas y Puerto Montt.
Los lugares a recuperar no se eligen al azar: un proceso de postulación abierto en abril y mayo, seguido de visitas técnicas y evaluaciones en terreno, definió las locaciones finales durante junio y julio. Las obras se ejecutarán entre agosto y octubre.
Los espacios intervenidos incluyen cuarteles de bomberos, centros culturales, establecimientos educacionales, parques, gimnasios y espacios comunitarios que prestan servicios esenciales, fortaleciendo el sentido de pertenencia y mejorando la calidad de vida de sus usuarios.
Un compromiso sostenido
A lo largo de sus 17 años de historia, “Chile Pinta” ha demostrado que la mejora del entorno físico es también una inversión en cohesión social. El trabajo conjunto entre empresas, organizaciones y comunidades ha permitido renovar miles de metros cuadrados y dejar huella en barrios de todo el país.



